Desde su fundación en 1990, el Instituto ha pasado de ser un proyecto pionero en energías renovables a convertirse en un ecosistema de investigación multidisciplinar con proyección internacional.
El Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), entidad dependiente del Cabildo de Tenerife, celebró este 30 de octubre su 35º aniversario con un acto institucional en su Centro de Visitantes, que reunió a autoridades, investigadores, colaboradores, personal y representantes de los medios de comunicación.
El acto contó con la presencia de la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila; el consejero insular de Innovación, Investigación y Desarrollo, Juan José Martínez Díaz; el alcalde de Granadilla de Abona, José Domingo Regalado; y el director técnico y de gestión del ITER, Carlos Suárez Rodríguez.
Durante la ceremonia se entregaron reconocimientos a figuras clave en la historia de la entidad, como Ricardo Melchior Navarro, primer presidente del ITER; Manuel Cendagorta-Galarza López, primer gerente del instituto; Antonio Cordobés, primer trabajador; y Guillermo Galván, el trabajador de mayor antigüedad en activo, en agradecimiento a su contribución a la creación, desarrollo y consolidación del Instituto.
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, felicitó a los homenajeados y agradeció “el trabajo y la implicación de todas las personas que han hecho posible que el ITER sea hoy un referente internacional”. En sus palabras, subrayó que “el ITER es una obra colectiva, construida por generaciones de profesionales que han puesto la ciencia y la tecnología al servicio del bienestar de la ciudadanía”.
Durante su intervención, la presidenta resaltó el compromiso del ITER con el desarrollo tecnológico, la sostenibilidad y el progreso científico de Tenerife. «Este ecosistema ha convertido a la isla en un espacio de energía limpia y de conocimiento abierto al mundo, pero sobre todo nos marca el camino hacia el futuro, con proyectos que pueden situar a Tenerife y a Canarias a la vanguardia de la investigación científica, la computación, la carrera aeroespacial o la investigación genética”, destacó.
La efeméride celebra tres décadas y media de compromiso con la ciencia, la innovación y la sostenibilidad, consolidando al ITER como uno de los principales motores del desarrollo tecnológico y energético de Canarias. Desde su fundación en 1990, el Instituto ha pasado de ser un proyecto pionero en energías renovables a convertirse en un ecosistema de investigación multidisciplinar con proyección internacional.
Por su parte, el consejero de Innovación, Investigación y Desarrollo, Juan José Martínez, destacó que “hoy el ITER es mucho más que un centro de investigación en energías renovables. Es un espacio donde convergen la ciencia, la tecnología y la innovación al servicio de un modelo de desarrollo sostenible, con iniciativas que fortalecen la capacidad tecnológica de Tenerife y posicionan al archipiélago como un nodo estratégico en el Atlántico”.
El director técnico y de gestión del ITER, Carlos Suárez Rodríguez, afirmó que “en estos 35 años, el ITER ha sido un motor decisivo para el desarrollo de Tenerife. Lo que comenzó como una pequeña oficina en el Cabildo se ha convertido en un grupo que integra tecnología, sostenibilidad y conocimiento. Hoy generamos cerca del 30 % de la energía renovable de la isla, contamos con infraestructuras de primer nivel —únicas en Canarias— y, sobre todo, con un equipo humano de más de 200 especialistas comprometidos con el futuro de Tenerife”.
Tres décadas y media de compromiso con la innovación y la sostenibilidad
Desde su fundación en 1990, el ITER ha pasado de ser un proyecto pionero en energías renovables a consolidarse como un ecosistema de investigación multidisciplinar con proyección internacional. Con más de cien megavatios de potencia renovable instalada, sus infraestructuras representan cerca del 30 % de la capacidad total renovable de Tenerife, y funcionan además como laboratorios a escala real para la investigación y la formación de talento.
Entre sus instalaciones destacan el Centro de Proceso de Datos D-ALiX, que alberga el superordenador Teide HPC; el Centro de Control de Generación de Energía; y laboratorios de fotovoltaica, genómica, química, electrónica y robótica. Asimismo, su red Canalink y el Telepuerto del ITER consolidan a Tenerife como un nodo tecnológico estratégico que conecta Europa, África y América.
Compromiso con la excelencia científica y el desarrollo sostenible
El reconocimiento internacional del ITER se refleja en distinciones como la otorgada por la UNESCO en 1999, que lo designó Centro de Excelencia para el Desarrollo y Difusión de las Energías Renovables, y el premio de CEOE-Tenerife 2025, que reconoce su contribución al desarrollo social, científico y ambiental.
Actualmente, el Instituto impulsa más de 57 millones de euros en proyectos de I+D+i, con programas en energías renovables, medioambiente, genómica y tecnología. Entre ellos destacan VOLTAIRE, SIROCO, PAULIA, GEOTERMAC, PRECISION-EPID y PERSEO, orientados a la descarbonización, la inteligencia artificial, la biotecnología y la monitorización ambiental.
Mirando hacia el futuro
El ITER afronta el futuro reafirmando su compromiso con la transición energética justa, la soberanía tecnológica y la innovación sostenible. Su estrategia apuesta por fortalecer la cooperación científica, impulsar el talento local y desarrollar soluciones tecnológicas que contribuyan al bienestar y al desarrollo sostenible de Canarias.

 
									 
					 
															

